lunes, 27 de octubre de 2014

SOBRE DANTE GEBEL: ¿CUÁL ES SU VERDADERA IDENTIDAD?


  Nicolás Serrano.   www. familiadelagracia.com
dante gebel campionHace tan sólo unos días, el famoso pastor argentino radicado en los Estados Unidos celebró su gran evento denominado “El Súper Clásico”, en la cancha de River Plate. Dicho evento, organizado especialmente para jóvenes, lleva 20 años de trayectoria. El mismo consiste en jornadas maratónicas de reuniones masivas (unas 90.000 personas asistieron a este último “Súper Clásico”) en las que diversos artistas y oradores tienen la oportunidad de exhibir sus talentos y pensamientos.
LAS RAZONES DEL SIGUIENTE ESCRITO
He orado al Señor preguntándole si debía volcar mis pensamientos respecto a Dante Gebel de manera pública o mantenerme en silencio. Y, más allá de lo que pueda ganar o perder, llegué a la conclusión de que es justo delante de Dios decir la verdad sin reservas en ocasiones como la presente. Deseo escribir con solemnidad, temor, equilibrio, celo, verdad y misericordia. Entre las razones que más me han inquietado para escribir el presente artículo se encuentran la inocencia, el emocionalismo y la ignorancia de muchos preciosos hermanos para discernir la identidad y las intenciones del famoso Gebel. Realmente me ha sorprendido, incluso, el ver cómo algunos amados hermanos instruidos en gran manera en las Escrituras han carecido de convicción a la hora de opinar sobre el último “Súper Clásico”.
Llamo a mis lectores a escuchar sin prejuicios emocionales. Tengo una convicción respecto a Gebel y quiero, de manera breve, mostrarles que tal convicción es una conclusión absolutamente obvia a la luz de las evidencias. Si mi juicio es erróneo, entonces estoy pecando y Dios se encargará de mí. Pero si ustedes, a la luz de las evidencias, se niegan a aceptarlas y se engañan o convencen a sí mismos usando argumentos emocionales y no bíblicos, déjenme decirles que están cometiendo un gravísimo error y que llevarán las consecuencias, no sólo ustedes, sino parte del pueblo de Dios. No les hablo con firmeza por el sólo gusto de ser severo, sino por amor (Dios me es testigo); y porque la situación lo amerita. Dios quiera que al final de este artículo muchos puedan darse cuenta de la necesidad de hablar con crudeza en estos tiempos y sobre todo cuando el Evangelio está siendo ultrajado.
SOBRE LA APOSTASÍA Y LAS FALSAS CONVERSIONES
Es mi intención ser breve y directo en esta nota. Pero, antes de hacer algunas observaciones sobre Gebel y sus enseñanzas, es necesario recalcar que la Biblia nos advierte mucho acerca de la apostasía y los falsos evangelios.
2 Ti. 3:1-5: “También debes saber esto: que en los postreros días vendrán tiempos peligrosos. Porque habrá hombres amadores de sí mismos, avaros, vanagloriosos, soberbios, blasfemos, desobedientes a los padres, ingratos, impíos, sin afecto natural, implacables, calumniadores, intemperantes, crueles, aborrecedores de lo bueno, traidores, impetuosos, infatuados, amadores de los deleites más que de Dios, que tendrán apariencia de piedad, pero negarán la eficacia de ella; a éstos evita”.
2 Co. 11:1-4; 13-15: “¡Ojalá me toleraseis un poco de locura! Sí, toleradme. Porque os celo con celo de Dios; pues os he desposado con un solo esposo, para presentaros como una virgen pura a Cristo. Pero temo que como la serpiente con su astucia engañó a Eva, vuestros sentidos sean dealguna manera extraviados de la sincera fidelidad a Cristo. Porque si viene alguno predicando a otro Jesús que el que os hemos predicado, o si recibís otro espíritu que el que habéis recibido, u otro evangelio que el que habéis aceptado, bien lo toleráis… Porque éstos son falsos apóstoles, obreros fraudulentos, que se disfrazan como apóstoles de Cristo. Y no es maravilla, porque el mismo Satanás se disfraza como ángel de luz. Así que, no es extraño si también sus ministros se disfrazan como ministros de justicia; cuyo fin será conforme a sus obras”.
2 P. 2:1: “Pero hubo también falsos profetas entre el pueblo, como habrá entre vosotros falsos maestros, que introducirán encubiertamente herejías destructoras”.
LA ACTITUD CRISTIANA FRENTE A LA APOSTASÍA
O sea que, según Dios, hay ahora, en medio de su pueblo, falsos profetas, falsos hermanos, falsos apóstoles, que no sólo no se presentan a sí mismos como tales, sino que se infiltran tan encubierta e inteligentemente entre las filas de la iglesia, que no son advertidos, a causa de su apariencia de piedad y mensaje piadoso; pero, aunque logran alcanzar el liderazgo, no son más que emisarios de Satanás, hombres vanagloriosos y amadores de los deleites más que de Dios, que finalmente con sus herejías desviarán al pueblo de Dios. ¿Es usted consiente de tal realidad? ¿Conoce a algunos falsos maestros? ¿Recuerda casos de líderes que se veían y hablaban muy bien, pero que en un momento se descubrieron sus intenciones maliciosas?
Si usted no puede responder positivamente a tales preguntas, puede que esté durmiendo y no ejercitando y usando su discernimiento o, peor aun, puede que usted mismo esté siendo arrastrado por amigos del diablo. ¡Oh, pero Pablo no dormía, Él se indignaba y llenaba del celo de Dios por Su pueblo, al ver que los falsos apóstoles los perturbaban! Y Pablo no se apartó del Espíritu de Jesucristo en su enardecimiento, más bien él dice: “Os celo con celo de Dios” (2 Co. 11:2), el mismo celo que impulsó a Jesús a actuar violentamente en la escena que vemos en Juan 2:13-17: “Estaba cerca la pascua de los judíos; y subió Jesús a Jerusalén, y halló en el templo a los que vendían bueyes, ovejas y palomas, y a los cambistas allí sentados. Y haciendo un azote de cuerdas, echó fuera del templo a todos, y las ovejas y los bueyes; y esparció las monedas de los cambistas, y volcó las mesas; y dijo a los que vendían palomas: Quitad de aquí esto, y no hagáis de la casa de mi Padre casa de mercado. Entonces se acordaron sus discípulos que está escrito: El celo de tu casa me consume”. ¿Conoce usted a dicho Jesús? ¿La idea que usted tiene, o que le han enseñado acerca de la personalidad de Jesús, admite un acto semejante de celo violento?
Jesús no ha cambiado, aunque sí lo ha hecho el cristianismo de hoy en día, en especial, en nuestra Argentina. Jesús actuó con severidad porque Él no fue dominado por un amor romántico por los hombres, Él no fue humanista, sino que fue siempre y en todo momento dominado por Su amor por el Padre y el celo de que Su Nombre sea santificado. Jesús no fue hombre-céntrico, sino Dios-céntrico. Como usted leyó en el texto de 2 Co. 11:1-4, Pablo observa que los falsos maestros predican a Jesús y al evangelio y que, incluso, a través de ellos, ¡muchos reciben a un espíritu que no es el Espíritu Santo, pero que imita Su venida!
El problema es que tales apóstatas predican a “otro Jesús”, “otro evangelio” y “otro espíritu”. O sea, con características diferentes a los originales. Sí, leyó bien. ¡Tal es la realidad (trágica realidad) en la que aun iglesias fundadas por los mismos apóstoles de Jesucristo caían! Pablo dice a la iglesia en Mileto: “Porque yo sé que después de mi partida entrarán en medio de vosotros lobos rapaces, que no perdonarán al rebaño” (Hch. 20:29). Si el diablo se atrevió a meterse con Pablo y las iglesias que él fundaba, ¡cuánto más lo hará con nosotros, pobres imitadores de Pablo!
SOBRE EL JUZGAR A LOS DEMÁS
Puedo imaginar que algunos ahora, o desde el comienzo, estarán pensando: “Pero, ¿no enseña la Biblia que no hay que juzgar?”. Sí y no. Jesús nos enseña que no debemos juzgar de manera superficial, sino espiritual. Tal es la idea principal en el contexto de la declaración de Jesús al decir: “No juzguéis, para que no seáis juzgados”, en Mateo 7:1-6. Pero Jesús no está diciendo: “No juzguen nunca de ninguna manera”. De hecho, en el versículo 5, Él termina su enseñanza sobre el no juzgar de manera superficial con un llamado al discernimiento y al juicio, ya que dice: “No deis lo santo a los perros, ni echéis vuestras perlas delante de los cerdos, no sea que las pisoteen, y se vuelvan y os despedacen”. Hay discernir quienes son perros y cerdos, juzgarlos como tales y evitarlos.
Pablo, el buen discípulo del Señor Jesús, reprende a la iglesia en Corinto por su letargia a la hora de juzgar el pecado en los miembros de la iglesia. Respecto a un hombre inmoral, Pablo dice: “Ciertamente yo, como ausente en cuerpo, pero presente en espíritu, ya como presente he juzgado al que tal cosa ha hecho. En el nombre de nuestro Señor Jesucristo, reunidos vosotros y mi espíritu, con el poder de nuestro Señor Jesucristo, el tal sea entregado a Satanás” (1 Co. 5:3-5). ¿Asiste usted a una iglesia en la se enseña la disciplina bíblica y se administra con justicia y misericordia? A menos que sea así, la verdad es que usted asiste a una iglesia plagada de falsos hermanos, a los cuales se les deja continuar en su ilusión.
Debemos temer juzgar, pero debemos temer juzgar mal; y debemos temer no juzgar, ya que es un mandamiento del Señor. En realidad, no juzgar es un acto de rebeldía a la palabra de Dios, a la vez que un absurdo. Muchos dicen: “No juzgues, estás actuando mal”; lo que significa que ellos mismos están juzgando a los que juzgan. ¿Pueden ver la contradicción? Es la misma contradicción del pluralismo creciente en nuestro país, que dice: “No hay verdad absoluta”, que en realidad significa: “La única verdad absoluta es que no hay verdad absoluta”.
Cuando Jesús dice: “Por sus frutos los conoceréis”, hablando de los falsos profetas, nos está diciendo: “Observen sus frutos, disciernan y den un veredicto”. Según Jesús, usted no puede permanecer neutral, usted debe juzgar. Vean el texto citado: Mateo 7:15-16: “Guardaos de los falsos profetas, que vienen a vosotros con vestidos de ovejas, pero por dentro son lobos rapaces. Por sus frutos los conoceréis. ¿Acaso se recogen uvas de los espinos, o higos de los abrojos?” Jesús está diciendo: “¿Acaso no pueden juzgar entre lo falso y lo verdadero? ¿No pueden darse cuenta que una enramada de uvas nunca dará espinos, y que de los higos no salen abrojos? ¿Pueden ver que es absurdo pensar que un verdadero profeta pueda dar malos frutos, tanto como esperan que un falso profeta no pueda dar buenos frutos? Es absurdo que ustedes no puedan juzgar entre los falsos profetas y los verdaderos, ¡tan absurdo como querer sacar uvas de espinos, o higos de abrojos!”
¡A LOS FRUTOS!
dante gebel 2  Quiero ahora enumerarles algunas de las razones por las que estoy convencido de que Gebel es un falso profeta. Por favor, les ruego que consideren las evidencias sin dejarse guiar por prejuicios emocionales, y que usen el discernimiento. No pueden permanecer neutrales ante las evidencias, algo deben hacer. Y quiero decirles que hay mucho más para decir en contra de Gebel de lo que diré, pero creo que será suficiente.
1) Dante Gebel se relaciona con falsos profetas y los recomienda: Entre lo más extravagantes amigos de Gebel, se encuentra el famoso Benny Hinn. Gebel estuvo junto con Hinn en la famosa iglesia denominada la “Catedral de Cristal”.  Benny Hinn es, sin duda alguna, un falso profeta, un emisario de Lucifer. Es patrocinador de varias herejías; entra ellas, la idea de que el Padre tiene un carácter menos amoroso que el Hijo.
2) Dante Gebel ha trabajado además con la cadena televisiva “Enlace”, un canal compuesto por falsos profetas, donde todo el día usted puede ver aberraciones de hecho, Enlace transmitió en vivo el último Súper Clásico.
Entre los eventos más populares de Enlace, se encuentran las famosas “maratónicas”, las cuales tienen el fin de recolectar dinero de manera masiva. La forma en la que se  manipula a las personas para que hagan pactos con Dios donde, supuestamente, pagan por bendiciones grandes, es insoportable. ¿Y saben qué? Solo unos pocos días antes del Súper Clásico, el 19 de Noviembre del 2013, Gebel participó en una maratónica. ¿Qué más evidencia se necesita para darnos cuenta de la verdadera identidad que hay detrás de la careta de Gebel?
3) Gebel dijo en el último Súper Clásico que su mensaje no ha cambiado. ¿Cuál ha sido siempre el mensaje de Gebel? Un mensaje basado en la auto-estima y el exitismo, aunque, claro, con algunos toques de piedad, no sea que lo descubran.
5) Predica un evangelio falso, exitista, y usa una falsa aplicación del evangelio, conocido como decisionismo (es decir, el método generalizado dentro de los evangélicos llamado “la oración del pecador”). Gebel ha tenido varios énfasis exitistas en su eventos y normalmente en sus predicaciones y, en todos sus Súper Clásicos, al concluir, siempre ha hecho uso de “la oración del pecador”. Sin embargo, hay serios problemas con tal método evangelístico, ya que no se encuentra en la Biblia, ni en la historia de la iglesia, y ha dado una falsa y mortal seguridad de salvación a millones de personas. No hay ningún problema con el hecho de que un pecador se dirija a Dios en arrepentimiento, ¡al contrario! El problema es la forma en la que predicadores como Gebel guían a su audiencia a realizar una oración de salvación, proveyendo una seguridad ficticia de la salvación. Escuchen cómo Gebel usa tal método.
Sin embargo, Gebel, en sus últimos Súper Clásicos, ha dicho cosas como las siguientes: “El cielo te aplaude de pie”, “Dios me dice que no hay ninguno en el cielo como tú”. Y ha guiado a su audiencia a realizar oraciones de “arrepentimiento” basadas en la autoestima, ya que, entre otras cosas semejantes, enseñó a los jóvenes a pedir a Dios que les permita dejar un legado tal que el mundo no los pueda olvidar (o sea, ¡que los haga famosos!). Creo que sí debemos dejar un legado que trascienda nuestra generación, pero viniendo de la boca de Gebel y en el contexto de sus enseñanzas, no podemos tomar bien tales afirmaciones.
Finalmente, el Súper Clásico terminó con baile y cánticos con letras que decían cosas como: “Estamos rockeando en River Plate”. Me pregunto si se atreverían a actuar y cantar así si la Presencia Majestuosa y Santa de Dios se hiciera real en ese lugar, o qué opinará el Señor Soberano de semejante cierre.
6) Gebel practica lo que se conoce como “la herejía de la confesión positiva”:
Al respecto, Rodrigo Ávila comenta: “Déjame explicar brevemente lo anti-bíblico y absurdo de las palabras de Gebel:
  1. Sólo Dios tiene la capacidad de producir realidad con sus palabras (Génesis 1:3, 1:24, Salmo 33:6). El pretender tener un atributo que sólo pertenece a Dios, es una muestra de arrogancia tremenda, lo cual es característico de los falsos maestros (2 Pedro 2:10).
  2. Gebel cree que puede, con el supuesto poder creador de sus palabras, erradicar “odio, envidia, rencor, mala fe y chisme”. El problema es que estas son obras de la carne (Gálatas 5:19-21), de las cuales el cristiano debe arrepentirse. El declarar en contra de estos pecados no tiene ningún efecto sobre la gente.
III. Si Gebel realmente tiene el poder de proteger y curar “a los jóvenes argentinos de todo abuso sexual emocional, económico y psicológico”, ¿por qué fue tan egoísta de sólo pensar en su país? ¿Por qué no “decretó” esto para el resto de Latinoamérica o, mejor, para el resto del mundo? Si Gebel tiene este poder y, sin embargo, se niega a usarlo en beneficio de más personas, entonces él es el ser más despreciable y egoísta que existe.
  1. Gebel dijo: “En uso de las facultades que me confiere el señor de las multitudes, el señor que me llamó”. Me pregunto: ¿A qué “señor” hace referencia? De seguro no es a Cristo, ya que Él hablo de que son pocos los que vienen a Él (Lucas 13:23-24), ya que el camino hacia la salvación es angosto (Mateo 7:14). En cambio, cuando se habla de un “señor de las multitudes”, o de muchos o incluso del mundo entero, se hace referencia a Satanás (Apocalipsis 12:9).
  2. Si Gebel realmente tiene la capacidad de derogar “todo decreto de muerte, sentencia de enfermedad, plagas, pestes y cualquier iniquidad”, yo lo animaría a que vaya a “decretar” esto al África. Sería una tremenda bendición para este continente, especialmente para los niños que mueren todos los días de enfermedades, plagas y pestes. Otra vez, si Gebel tiene este poder y, sin embargo, se niega a usarlo en beneficio de más personas, entonces él es el ser más vil y egoísta que existe.
  3. Finalmente, quiero que notes que Gebel dice al final que publica sus “decretos” para “que sea de conocimiento de los ciudadanos y entre en vigencia inmediatamente dejando anulada toda ley que contravenga está presente disposición”. Pero, ¿Qué si Dios, de acuerdo a sus propósitos soberanos, desea que sus hijos pasen por algún tipo de aflicción o dificultad (1 Pedro 1:6-9)? ¿Estará impedido Dios de hacerlo ya que Gebel anuló toda ley que contravenga lo dicho por él?
7) Gebel es blasfemo, ya que muchísimas veces dice que Dios le habla, incluso que ha escuchado a Jesús sollozando. También, una y otra vez, habla en nombre de Dios sin reverencia o prudencia, sino con ligereza.
8) Dante Gebel es un busca fama. Por eso, él tiene un programa llamado “El show de Dante”, donde, ¿saben quién es la estrella?…obvio, Dante Gebel. ¿Se imaginan al apóstol Pedro haciendo “El show de Pedro”? ¿No sería acaso escandaloso para nosotros pensar que los sobrios apóstoles hicieran algo así? ¿Piensan que Jesús festeja una show semejante? Los predicadores deben ser serios, es un requisito bíblico (Tit 2:7).
SOBRE EL CAMBIO EN LOS ÚLTIMOS MENSAJES DE GEBEL
Muchos dirán: “Pero Gebel ha cambiado su mensaje en el último tiempo”. Bueno, en realidad él dijo en el último Súper Clásico que no había cambiado su mensaje. Pero es cierto que en los últimos tiempos comenzó a criticar algunas prácticas heréticas que tanto él como muchos otros han ejercido. Y, ¿qué hay de sorprendente? ¡Lo que es sorprendente es la inocencia con la que algunos se confunden al escuchar a Gebel decir algunas cosas correctas! ¡Vamos! ¿Qué esperan, que el diablo salga al escenario con cuernos, fuego, cadenas y un báculo tenebroso? ¡No es maravilla que se disfrace de ángel de luz! ¿Me estoy excediendo? ¡No! ¡Me estoy quedando corto!
2 Co. 11:1-4: “¡Ojalá me toleraseis un poco de locura! Sí, toleradme. Porque os celo con celo de Dios; pues os he desposado con un solo esposo, para presentaros como una virgen pura a Cristo. Pero temo que como la serpiente con su astucia engañó a Eva, vuestros sentidos sean de alguna manera extraviados de la sincera fidelidad a Cristo. Porque si viene alguno predicando a otro Jesús que el que os hemos predicado, o si recibís otro espíritu que el que habéis recibido, u otro evangelio que el que habéis aceptado, bien lo toleráis”.  2 Co. 11:29 “¿A quién se le hace tropezar, y yo no me indigno?”.
Sobre el giro de las últimas enseñanzas, es pertinente notar que está, descarada y literalmente copiando mensajes de otros, que sí son verdaderos ministros del Evangelio. Por ejemplo, hace poco Gebel predicó un mensaje llamado “El secreto mejor guardado del infierno”, al cual también hizo referencia en su último evento. Pero, el problema es que el tal es un mensaje del evangelista Ray Confort. Sin embargo, Gebel en ningún momento dijo que estaba siguiendo el material de Confort, actuando así hipócritamente. Lo mismo está haciendo con algunos escritos de John MacArthur. Gebel es demasiado “vivo” y perverso como para tomar con inocencia sus giros en las últimas enseñanzas.
No podemos juzgar la vida de un hombre por uno o unos pocos mensajes, sino por la totalidad de su trayectoria. Además, en el caso de Gebel, aunque en el último tiempo sus argumentos han mejorado, desde un principio sus conferencias se han caracterizado por una mezcla de exitismo y piedad, así que no es muy extraordinario que haya escogido el tema de la cruz para su último mega evento. Pregunto: ¿Acaso el falso profeta Balaám no predicó también, al menos algunas veces, la verdad?
Lo único que Dios desea escuchar de tal hombre, es una confesión tanto privada como pública de sus pecados en gran lamento y arrepentimiento, cosa que aún no ha ocurrido. Como dije antes, Gebel mencionó hace unos días que nunca ha cambiado su mensaje. Todos sus libros heréticos y demás continúan a la venta. El hombre, astutamente, pretende “limpiarse” a causa de la creciente ola de acusaciones justas contra él. Incluso Benny Hinn está haciendo lo mismo, atacando a otros para salvar su nombre.
CONCLUSIÓN
Puedo seguir, pero creo que ya es suficiente. Quienes tengan oídos para oír ya se habrán convencido de que Dante Gebel es un falso profeta, un emisario de Satanás. Más evidencia en contra de Dante Gebel no es necesaria. Si usted no puede ver la verdad después de todo lo expuesto, entonces usted probablemente no quiere ver la verdad. ¿Qué más necesita ver y oír? ¡¿QUÉ MÁS?!
Por favor, basta, basta, ¡BASTA! ¿Dónde están los hombres y mujeres de Dios en esta generación? ¿Dónde están los que siguen las pisadas del apóstol Pablo, quién dijo: “Estoy puesto para la defensa del evangelio” (Fil 1:17)? Dios permite que escuchen a los falsos profetas para probarlos, para ver si van a obedecer a Su Palabra más que a los hombres (Jue 3:4). Cuando el bendito Evangelio de Jesucristo es manchado, la Gloria de Dios y la salvación están en juego. Por tanto: “Amados, por la gran solicitud que tenía de escribiros acerca de nuestra común salvación, me ha sido necesario escribiros exhortándoos que contendáis ardientemente por la fe que ha sido una vez dada a los santos” (Judas 1:3). Declaremos, por amor a Dios, junto con Pablo: “Estoy maravillado de que tan pronto os hayáis alejado del que os llamó por la gracia de Cristo, para seguir un evangelio diferente. No que haya otro, sino que hay algunos que os perturban y quieren pervertir el evangelio de Cristo. Mas si aun nosotros, o un ángel del cielo, os anunciare otro evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema. Como antes hemos dicho, también ahora lo repito: Si alguno os predica diferente evangelio del que habéis recibido, sea anatema. Pues, ¿busco ahora el favor de los hombres, o el de Dios? ¿O trato de agradar a los hombres? Pues si todavía agradara a los hombres, no sería siervo de Cristo” (Gá. 1:6-10).
La ira de Dios está sobre nuestro país y Su juicio sobre nuestra tierra avanza; por tanto, en el tiempo que nos queda: ¡“Esfuérzate, y esforcémonos por nuestro pueblo, y por las ciudades de nuestro Dios; y haga Jehová lo que bien le pareciere” (2 S. 10:12)!
Obedezcan el mandato del Espíritu Santo a través de Pablo:
1Ti. 6:3-5 “Si alguno enseña otra cosa, y no se conforma a las sanas palabras de nuestro Señor Jesucristo, y a la doctrina que es conforme a la piedad, está envanecido, nada sabe, y delira acerca de cuestiones y contiendas de palabras, de las cuales nacen envidias, pleitos, blasfemias, malas sospechas, disputas necias de hombres corruptos de entendimiento y privados de la verdad, que toman la piedad como fuente de ganancia; apártate de los tales”. ¡Apártate de los tales, por el amor de Dios!
Trabajemos por una reforma bíblica. Volvamos a las Escrituras, volvamos a revisar la historia de la iglesia. El costo es alto, pero vale la pena. Hay mucho en juego. Ya hemos perdido mucho tiempo. Dediquémonos al estudio serio de la Palabra de Dios, oremos de una manera extraordinaria, seamos celosos y compasivos, y Dios estará con nosotros. Hagamos que el Nombre de Dios sea exaltado en nuestro país y que el testimonio de su iglesia sea limpiado.
Soli Deo Gloria

sábado, 18 de octubre de 2014

¿DIEZMO OBLIGATORIO? POR FAVOR SEÑORES PASTORES DEJEN DE ESTAFAR A SUS POBRES MIEMBROS .


Breve fragmento del estudio de Filipenses relativo a la cuestión del diezmo: ¿Está vigente el diezmo?- … hay muchas iglesias, llamadas evangélicas, sobre todo involucradas en los movimientos carismáticos cuyos líderes enseñan a sus miembros que el diezmo esta vigente para los cristianos como mandamiento de obligado cumplimiento. En algunas de ellas, incluso obligan a sus miembros a presentar sus nóminas laborales para controlar la aportación que el sujeto debe hacer cada mes y a veces, domicilian en entidades bancarias el importe exigible para que se haga de forma automática. En otras, el donante forzoso tiene que meter su dinero en unos sobres convenientemente preparados en los que debe identificarse con su nombre y apellidos. También presumen de promover el evangelio de la gracia, pero por lo que se ve, un poco de ley en beneficio propio no es malo. Yo he presenciado penosas escenas de auténtica extorsión y manipulación de las gentes sencillas, de las que podría escribir un largo tratado. Para algunos el fin justifica los medios? En muchas iglesias locales se enseña a sus miembros que tienen la obligación de entregar puntualmente un diezmo de sus ingresos, bajo la pretensión de que la Biblia lo enseña y no hacerlo constituye el pecado de ?robar a Dios?. Por causa de esto vamos a dedicar un espacio al estudio de si el diezmo está vigente para el cristiano ó no. Ya hemos visto en diversas partes de nuestro estudio que la ley mosaica está abolida para todos los cristianos, pero mucho más para los gentiles, que nunca tuvieron ese yugo sobre si.
No vamos a volver a extendernos sobre anteriores argumentos. Todos aquellos antiguos preceptos que estaban puestos sobre el pueblo de Israel, y nunca sobre los gentiles, fueron clavados en la cruz y el cristiano, salvo por gracia entra en la ley de Cristo, la de la libertad (Gal. 5:1, 13; St. 1:25; 2:12; 1Pe. 2:16; 2ª Cor. 3:17). Libertad para actuar, cuyos límites son la responsabilidad delante de Dios y no ser motivo de tropiezo delante de los hombres (Rom. 14:10, 13 y 2ª Cor. 5:10), conscientes de que un día tendremos que dar cuenta ante el tribunal de Cristo de todo lo que hayamos hecho en nuestra vida terrenal. Una vez dicho esto, aclaro que no pretendo influir en ningún sentido sobre aquellos hermanos que conociendo su libertad, deciden voluntariamente y sin coacciones ni manipulaciones disponer como crean conveniente de sus ofrendas. Los asuntos de ofrendas, como de comer carne ó ser vegetariano, guardar un determinado día ó ninguno, no tienen ninguna norma ó mandamiento de obligatoriedad en el nuevo pacto. Son aspectos que pertenecen a la esfera de la conducta, relación y culto personal de cada cristiano y la forma de vivir su fe, conforme al grado de conocimiento y madurez que haya alcanzado.
Por tanto debemos respetar cualquier decisión voluntaria de los demás sin críticas ni exigencias, y permitir a cada uno actuar en el marco de su propia conciencia. El diezmo de Israel.- Leemos en el Antiguo Testamento que Israel tenía dos tipos de ofrendas, una obligatoria y reglamentada y otras voluntarias ó discrecionales que no estaban sujetas a ninguna regulación, ya fuese periódica ó cuantificable. La obligatoria era el diezmo. Las discrecionales eran otras donaciones al margen del diezmo. Ex. 35:29, 36:3, Lev. 22:23 y Deut. 16:10, hablan de esas ofrendas voluntarias para diversos fines que procedían de corazones libres y expontaneos. El diezmo de Israel era una ley y una obligación exigible. ¿Y por qué razón era exigible? Sencillamente porque era una compensación, una contraprestación, por ¿algo? que tampoco era voluntario, sino que había sido impuesto por Dios como obligatorio: Dios eligió a una tribu de entre las doce, la de Leví, para administrar el pacto, servir al pueblo y ocuparse exclusivamente de las cosas espirituales de la nación, y no lo hizo por un ofrecimiento voluntario de la tribu, sino por una designación soberana (Núm. 1:48-50; 3:12).
En virtud de esa inexcusable misión y servicio ellos recibirían los diezmos del pueblo, así como las ofrendas procedentes de los votos (Núm. 18), pero a cambio y en virtud de esa misma decisión Soberana la tribu de Leví quedó excluida del reparto de la tierra prometida (Núm. 18:20 y 21). Su parte de la tierra fue a engrosar las porciones de las demás tribus, quienes las trabajarían, explotarían y en justa compensación debían sostener a los levitas con sus diezmos.
Num. 18:26 afirma que los diezmos son la ¿compensación? por la heredad, la propiedad de la que fueron desposeídos, aunque con más precisión debemos decir excluidos (Deut. 18:1 y Num. 1:47). Y a su vez, los levitas ocupaban el sacerdocio y los demás oficios relacionados con el culto ?en exclusiva y en sustitución? del pueblo. Pero todo esto nada tiene que ver con la iglesia. Ya hemos tratado en varias ocasiones que el pacto con Israel era un pacto de descendencia y bendición terrenal como pueblo y linaje, prototípico en muchos aspectos, como un leccionario simbólico del nuevo pacto, pero sobre diferentes ámbitos y aplicaciones. En Heb. 7:12 dice que al cambiar el sacerdocio también se cambió la ley. En el nuevo pacto no hay sacerdotes por sustitución obligatoria, sino que todos que hemos aceptado libremente y por la fe el perdón otorgado por gracia, basado en el sacrificio de Jesucristo, somos sacerdotes (1Ped. 2:9), y todos debemos, no por obligación sino por gratitud y responsabilidad respectivamente que ofrecer a Dios nuestros sacrificios espirituales, para lo cual hemos sido dotados por el Espíritu Santo y facultados para acceder directamente y sin intermediarios a la misma presencia de Dios. Hay en este sacerdocio cristiano universal, como también hubo en el levítico, quienes sirven diligentemente y quienes lo hacen negligentemente (1ªCor. 4:1-2). Eso no convierte de ninguna manera a los diligentes  en sacerdotes y a los negligentes en laicos. Así pues, si el sacerdocio tuviera que ser sostenido, todos tendríamos que percibir el salario, y de hecho todos lo recibiremos pero no de los hombres, sino del Dueño de la mies, que es nuestro Señor, el que nos ha llamado y nos ha nombrado para ser sus colaboradores, embajadores y apóstoles. Es el Señor quien se ocupa de los suyos. Es a El mismo a quien rogamos y al que debemos presentar, como ya hemos visto, nuestras peticiones y exponer nuestras necesidades. 
El diezmo de Abraham y de Jacob.- Algunos de los defensores de la recaudación del diezmo exigible a los cristianos, buscando argumentos para defender su posición afirman que el diezmo no empezó en la ley mosaica porque Abraham pago diezmos a Melquisedec antes de que la ley fuese dada (Gen. 14:20; Heb. 7:2-12). Y que también Jacob determinó dedicar a Dios el diezmo de sus bienes (Gen. 28:22). Vamos a tratar ambos casos, porque conviene que este asunto quede claro: El relato de Génesis 14 es ciertamente ambiguo en detalles. Hay una guerra entre una confederación de cuatro reyes y otra de cinco reyes. Podríamos decir sirios contra palestinos.
 La primera confederación, la siria, derrota a la segunda en una batalla que tuvo lugar en las inmediaciones de Sodoma, y se llevaron como botín, junto a las riquezas de los vencidos, a Lot y a su familia que habían acudido en apoyo de los sodomitas. Avisado Abraham, junta a sus servidores, y con la ayuda de otros amigos (y posiblemente los siervos de éstos), persigue a los sirios hasta cerca de Damasco donde consigue derrotarlos y recuperar el botín de guerra así como los cautivos, entre ellos a su sobrino. De regreso de la campaña, Abraham se encuentra con dos reyes, Melquisedec, rey de Salém (mas tarde Jerusalén) y Bera rey de Sodoma, y la situación aparece algo confusa, por lo que podemos acudir para nuestra ayuda al relato que hace el historiador Josefo (Antigüedades de los Judíos libro I, cap. X), que de alguna manera proporciona una exégesis del pensamiento rabínico de su época sobre este pasaje. Dice que Melquisedec abasteció generosamente al ejercito de Abraham dándole abundantes bendiciones. Y mientras se hallaban festejando la victoria- alabó a Dios por haber entregado en sus manos al enemigo. Abraham entonces le dio la décima parte del botín y él la aceptó? Al recibir jubiloso al victorioso Abraham, y por bendecirle en el nombre de Dios, el patriarca por su propia voluntad e iniciativa le hace partícipe del fruto de su victoria. Por su parte el rey de Sodoma dijo que se conformaba con que le devolviera las personas y que retuviese las cosas, pero Abraham no quiso y, una vez deducida la parte que correspondía a sus aliados, le dio al rey de Sodoma todo lo que le había pertenecido antes de la batalla. De esta historia podemos extraer algunas cosas.
Primero, que Abraham ni antes ni después nunca más dio diezmos a nadie.
 Segundo, que entregó de los bienes de esta campaña concreta, no de los bienes obtenidos cotidianamente por su trabajo y hacienda.
 Tercero, que lo hizo por propia iniciativa, no por precepto de Melquisedec, ni tampoco divino, sino que viendo que Melquisedec servía al mismo Dios y ofrecía sacrificios como sacerdote quiso participar en tales sacrificios, cumpliendo aunque en una forma ignorada por él, pero ciertamente profética, como un tipo del sacerdocio levítico, pues como dice Hebreos, a pesar de que Leví no había nacido, en el propio Abraham estaba su raíz ó simiente, y en su pacto, el pacto mosaico. Así pues, este diezmo aún en su parte más espiritualizada es solo asimilable al pacto mosaico, pero no a la iglesia. El caso de Jacob es más sencillo. Jacob tras la experiencia de Haram, hizo un voto personal condicionado, una promesa que tenía dos partes. Si Dios le guardaba en el viaje y llegaba con bien a su destino, él apartaría de sus bienes un diez por ciento para Dios. Esta es una forma típica de la carne y no del Espíritu, pero aun de todas formas este voto no representa más que otra decisión personal y libre. Este tipo de votos es igualmente típico del viejo pacto: la contraprestación. Los votos implicaban ofrendas materiales a cambio de que se nos otorgue alguna petición de bendición material cumplida. Pero en el nuevo pacto, el que está presidido por la gracia y el amor ágape, tales promesas están absolutamente fuera de lugar. Dios merece nuestra gratitud, adoración y alabanza no por los regalos materiales y bendiciones que hace a sus hijos, sino porque nos ha amado primero, cuando éramos enemigos, nos reconcilió y nos adoptó como hijos, y ese amor no se basa en contraprestaciones. Si creemos que alguien necesita algo de nosotros, debemos actuar y dar sin negociar con Dios nuestra caridad a cambio de un beneficio personal. De todas y volviendo al tema de Jacob, tampoco nadie sabe como se cumplió su parte del trato ni bajo que forma hizo llegar a Dios tales bienes prometidos ni durante cuánto tiempo, probablemente fuese mediante sacrificios cruentos en un altar. Las ofrendas en la iglesia cristiana.- En materia de ofrendas, la decisión personal es fundamental. La viuda dio todo lo que tenía en una ocasión al menos (Mr. 12:42-44). Zaqueo arrepentido destinó para los pobres el cincuenta por ciento de cuanto poseía, (Lc. 19:8). Pero los fariseos aunque daban escrupulosamente el diezmo para sostén de los sacerdotes y levitas (Mt. 23:33), eran avaros (Mt. 16:14), y luego no cumplían con la misericordia de ayudar a los necesitados, ni siquiera de su propia familia (Mt. 15:5). El diezmo obligatorio ha sido históricamente ajeno a las iglesias cristianas, solamente en el siglo VIII el emperador Carlomagno estableció sobre sus súbditos un impuesto del diez por ciento para el sostenimiento eclesiástico. Resumiendo, apartar un diezmo es tan bueno como destinar cualquier otra cantidad que uno voluntariamente determine, si lo que pretende es disciplinarse en forma regular de distribuir sus ofrendas y donaciones para atender como cristiano las necesidades relacionadas fundamentalmente con: 
  •  1.- Dar para Dios a través de atender las necesidades materiales de los hermanos en la fe (Gal. 6:10) 
  • 2.- Su parte en las obligaciones y gastos sociales de las iglesias locales, y 
  •  3.- La ayuda para ministerios con los que se sienta identificado y desee participar. 
 Y aquí he mencionado tres capítulos diferentes, para desarrollarlos más ampliamente en las próximas páginas. Ahora bien, no debemos olvidar que si uno convierte en ley su propio diezmo voluntario, es decir, si cuando ha apartado su diezmo, se le presenta una necesidad que debe asistir y pudiendo socorrer no lo hace en función de que ya dio el diezmo, esta adoptando la misma actitud que los fariseos, se ha convertido en un legalista. 1.- Dar para Dios.- De los tres apartados mencionados en el párrafo anterior, solo el primero puede ser llamado con criterio ?dar para Dios?, y para ello tenemos que aplicarlo en el contexto de las palabras de Jesús en Mt. 25:35-45.
 En ellas, Jesucristo, que es Dios, enseñaba que atender en las necesidades a nuestros hermanos en la fe (dar de comer, beber, hospedar, vestir, visitar, etc.) por amor a su nombre equivale a que hiciésemos tales cosas a El mismo. Así dijo: en cuanto lo hicisteis á uno de estos mis hermanos pequeñitos, á mí lo hicisteis.
 ¿Y quienes son sus hermanos? Jesús también lo aclara: ?Todo aquel que hiciere la voluntad de mi Padre, ese es mi hermano?? (Mt. 12:50). ¿Y que es hacer la voluntad del Padre? Creer en el que ha enviado, Jn. 6:29. Así el objeto primordial de la misericordia y de la solidaridad cristiana empieza por la familia de la fe. Aquellos con los compartimos también la misma esperanza. La historia obra social de las iglesias cristianas en los siglos II y III fue impresionante. Tertuliano afirma que a finales del siglo II las iglesias solían tener un intendente ó responsable de la caja común a la que de forma voluntaria contribuían los fieles con libertad, que era quien hacía llegar a los fondos a los necesitados. Con ellos se sufragaba la sepultura de los pobres, el cuidado de los huérfanos sin recursos, de los ancianos, los enfermos ó los condenados por su fidelidad a la fe cristiana. Otra de las partidas más importantes se destinaba a liberar a los esclavos y a los presos rescatándolos por precio. A pesar de que nunca se pronunciaron los cristianos en contra del sistema de esclavitud bajo la forma de una crítica política ó social generalizada, sin embargo por la vía práctica se preocuparon por ayudar a mejorar sus condiciones de vida emancipando a cuantos pudieron. La Carta de Ignacio de Antioquia a Policarpo de Smirna alude a que muchos esclavos eran rescatados a cargo de la caja de la comunidad. Para este propósito se solían destinar también aportaciones privadas directamente sin pasar por la caja común.
 En el año 250, la iglesia de Roma atendía de forma regular a más de 1500 pobres y la de Antioquia a finales del siglo IV a más de 3000. Durante las pestes, los cristianos también estaban en primera fila visitando y ayudando a las poblaciones con sus medios económicos, pero sobre todo con sus trabajos, lo que a muchos de ellos les costó la vida por contagio.También destacaba la hospitalidad, y como menciona Dionisio, obispo de Corinto en tiempos de Marco Aurelio, la comunidad de Roma atendía y hospedaba a los extranjeros y forasteros. Un gran medida del esfuerzo económico de la iglesia apostólica e inmediatamente post-apostólica estaba destinado como hemos dicho, a los pobres y necesitados, huérfanos, viudas, ancianos, enfermos y penados por causas judiciales, pero también para los transeúntes y extranjeros. Sin embargo no podemos olvidar que en la actualidad y en los países más desarrollados, los gobiernos han asumido tareas de asistencia social que en aquellos tiempos tenían que cubrirse desde la caja común de las iglesias apostólicas. En nuestros tiempos, a través de las leyes, todos los ciudadanos, sean cristianos ó no, tenemos la obligación de contribuir mediante impuestos para las atenciones sociales que antes solo se atendían con actuaciones de caridad. Así, pensiones de vejez, de viudedad, de orfandad, gastos sanitarios, medicinas, educación, desempleo, atención para desvalidos, enfermos crónicos, familias numerosas, etc. se atienden con cargo a contribuciones impositivas directas e indirectas de todos los ciudadanos, sean cristianos ó no. Esta contribución, así como los fondos que los países más desarrollados entregan a los menos desarrollados en formas de ayudas, bien por organismos oficiales ó por ONG?s, están saliendo también del bolsillo de los ciudadanos, y por lo tanto los cristianos también están otorgando ya su dinero para todos esos fines solidarios. Con todo, como eso no es más que una gota de agua en un océano de necesidades, y miles de millones de personas en el mundo carecen de lo más elemental.
Nuestras conciencias deben ser despertadas para llevar una mayor solidaridad y amor practico canalizado por organizaciones cristianas de honradez y seriedad contrastada, siendo generosos no de lo que nos sobra sino valorando, no por ley de diezmo ó cualquier otra obligación, por animo voluntario y generosidad que Dios nos ha permitido ser en muchas ocasiones unos privilegiados, para hacernos responsablemente sensibles a las necesidades de todo tipo que nuestros hermanos tienen en muchos lugares del mundo. Además es una oportunidad para la propia dicha espiritual porque más bienaventurado es dar que recibir. Sigue el tema con el siguiente indice: – Los gastos de convivencia social (la iglesia local) – las iglesias (los edificios de reunión de la iglesia) – El robo de iglesias. – El apoyo a ministerios cristianos. – Profesionales y famosos “campañeros” – El evangelio de la prosperidad. – Viajantes por toda la tierra. – Vivir por fe. – Pastores y obreros asalariados a tiempo completo (Que es tiempo completo?) – Los salarios y los conyuges de los obreros. – Negocios cristianos. Y antes del texto intercalado: La cooperación económica de los Filipenses con Pablo. La carga como apóstoles de Cristo Las ofrendas y colectas en la iglesia apostólica Mil y una treta para sacar dinero a los cristianos: El Purgatorio, las penitencias pecuniarias. La explotación económica de los servicios eclesiales. El diezmo obligatorio. Saludos Pablo Blanco. 

LAS OFRENDAS PARA LOS POBRES SI...... ¿LOS DIEZMOS PARA LOS PASTORES ? ES MENTIRA

darAl entrar en una iglesia evangélica, uno de los temas más predicados es el diezmo. En este articulo queremos tratar este tema a la luz de las enseñanzas
de Jesús y los apóstoles para verificar si es correcto o no exigir el diezmo.
Al examinar todas las enseñanzas de Cristo y los apóstoles en el Nuevo Testamento podemos notar que no hay ningún mandamiento acerca del diezmo. En el Nuevo Testamento, el diezmo ya no existe, al igual que otros mandamientos del Antiguo testamento, como: guardar el sábado, no comer ciertos alimentos, y ofrecer holocaustos.
¿Estamos diciendo entonces que no tenemos que compartir lo que tenemos? Al contrario, lo que podemos encontrar en el Nuevo Testamento, son mandamientos
y ejemplos que nos enseñan cómo debemos dar. En el Nuevo Testamento, Jesús y los apóstoles nos enseñan vez tras vez que debemos compartir nuestros bienes
y dar de lo que tenemos.
En este tratado queremos mostrar entonces, estas enseñanzas para dar respuesta a las preguntas: ¿Para quién y con qué propósito son estas ofrendas? y ¿cuánto
nos exige? Así puede usted evaluar si su iglesia está enseñando lo correcto o no. Pero sobre todo la pregunta personal que usted debe hacerse es: ¿Estoy
yo haciendo lo que Cristo me ordena hacer con mis bienes o hago sólo lo que mi pastor dice?
LO QUE ENSEÑÓ JESÚS
dar 1Empezamos con lo que enseñó nuestro Señor Jesús… “Uno de los jefes preguntó a Jesús: -Maestro bueno, ¿qué debo hacer para alcanzar la vida eterna?
Jesús le contestó: -¿Por qué me llamas bueno? Bueno sólo hay Uno: Dios. Ya sabes los mandamientos: no cometas adulterio, no mates, no robes, no digas mentiras en perjuicio de nadie, y honra a tu padre y madre.
El hombre le dijo: -Todo esto he cumplido desde joven. Al oír esto Jesús le contestó: – Todavía te falta una cosa: – Vende todo lo que tienes y dáselo a los pobres. Así tendrás riqueza en el cielo. Luego ven y sígueme. Pero cuando el hombre oyó esto se puso muy triste porque era muy rico.”
 Lucas 18:18-23.
Noten a quiénes mandó Cristo que el joven debía dar la ofrenda: a los pobres. ¿Qué pidió Cristo de este hombre rico? ¿Acaso le pidió que le ofrendara la
décima parte de sus bienes a Él o a sus discípulos? ¿Acaso Cristo le pidió una ofrenda especial para Él mismo? Como podemos ver, en todas sus enseñanzas, Cristo en ninguna ocasión Pidió una ofrenda o diezmo para Él mismo.
¿Cómo entonces podemos dar una ofrenda a Cristo?
Permita que este pasaje aclare la pregunta…Cristo dijo: – “Cuando el Hijo del hombre venga rodeado de esplendor y de todos sus Ángeles, se sentará en su trono glorioso. La gente de todas las naciones, reunirá delante de Él, y Él separará unos de otros, como el pastor separa las ovejas de las cabras. Pondrá las ovejas a su derecha y las cabras a su izquierda. Y dirá el Rey a los que están a su derecha: vengan ustedes los que han sido bendecidos por mi padre; Reciban el reino que está preparado para ustedes desde que Dios hizo el mundo. Pues tuve hambre y ustedes me dieron de comer, tuve sed y me dieron de beber; Anduve como forastero y me dieron alojamiento. Estuve sin ropa, y ustedes me la dieron; estuve enfermo y me visitaran; estuve en la cárcel y vinieron a verme. Entonces los justos preguntarán: Señor, ¿Cuándo te vimos con hambre y te dimos de comer? ¿O cuándo te vimos con sed y te dimos de beber? ¿O cuándo te vimos como forastero y te dimos alojamiento, o sin ropa y te la dimos? , ¿O cuándo te vimos enfermo o en la cárcel y fuimos a verte? El rey les contestará: Les aseguro que todo lo que hicieron por uno de estos hermanos míos más humildes, por Mí mismo lo hicieron. Entonces dirá también a los de la izquierda: “Apartaos de mí, malditos, al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles, porque tuve hambre, y no me disteis de comer; tuve sed, y no me disteis de beber; fui forastero, y no me recogisteis; estuve desnudo, y no me vestisteis; enfermo y en la cárcel, y no me visitasteis”. Entonces también ellos le responderán diciendo: “Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, sediento, forastero, desnudo, enfermo o en la cárcel, y no te servimos?” Entonces les responderá diciendo: “De cierto os digo que en cuanto no lo hicisteis a uno de estos más pequeños, tampoco a mí lo hicisteis”. Irán estos al castigo eterno y los justos a la vida eterna,” Mateo 25:31-40 Como podemos ver: dar a los pobres es como dar directamente a nuestro Señor.
¿CÓMO ENTONCES DEBEMOS DAR A LOS POBRES?
No hagan sus buenas obras delante de la gente para ser vistos de ellos. Si lo hacen así, su padre que está en los cielos no les dará ningún premio. Por
eso cuando ayudes a los necesitados, no sepa tu izquierda lo que hace tu derecha. Hazlo en secreto. Y tu Padre que ve lo que haces en secreto, te dará
tu premio
.” Mateo 6:1-4. En muchas iglesias que exigen diezmos los pastores tienen bien controlado para que todos saben quien está diezmando y quien no lo esta. Según lo que Cristo enseño, nadie debe saber que usted ha dado ni el pastor ni nadie.. Hazlo en secreto…
¿CUÁNTO ENTONCES DEBEMOS DAR?
“No tengan miedo, ovejas mías; ustedes son pocos, pero su Padre en su bondad ha decidido darles el reino. Vendan lo que tienen, y den a los necesitados;
procúrense bolsas que no se hagan viejas, riqueza sin fin en el cielo, donde el ladrón no puede entrar ni la polilla destruir. Pues donde esté tu riqueza,
allí estará también tu corazón”.
 Lucas 12:32-34. Como podemos ver, seguir a Jesús nos cuesta mucho más que sólo la décima parte de nuestra ganancia. Si todavía hay duda de esto, Cristo también dijo: -“Si alguien te demanda y te quiere quitar la camisa, déjale que también se lleve tu capa. Si te obligan a llevar carga una milla, llévala dos. A cualquier que te pida algo, Dáselo; y no le vuelvas la espalda al que te pida prestado. Yo les digo amen a sus enemigos y oren por quienes los persiguen. Así ustedes serán hijos de su Padre que está en el cielo…” Mateo 5:40-42 y 44-45. Aquí vemos que seguir a Jesús nos puede costar todo, hasta nuestra vida en manos de nuestros enemigos.
¿COMO SEGUÍAN A JESÚS LOS APÓSTOLES?
“Todos los creyentes que eran muchos pensaban y sentían de la misma manera. Ninguno decía que sus cosas fueran solamente suyas, sino que eran de todos…
…No había entre ellos ningún necesitado, porque quienes tenían terrenos y casas, los vendían, y el dinero lo ponían a disposición de los apóstoles para
repartirlo entre todos, según las necesidades de cada uno
” Hechos 4:32-34.
¿Será que los apóstoles se aprovechaban de estas ofrendas? “Un día, Pedro y Juan fueron al templo para la oración de las tres de la tarde. Allí en el templo, estaba un hombre paralítico de nacimiento, al cual llevaban todos los días y lo ponían junto a la puerta llamada la Hermosa, para que pidiera limosna a los que entraban. Cuando el paralítico vio a Pedro y a Juan,
que estaban a punto de entrar en el templo, les pidió una limosna. Ellos lo miraron fijamente, y Pedro le dijo: – Míranos. El hombre puso atención, creyendo
que le iban a dar algo. Pero Pedro dijo: – No tengo oro ni plata, pero lo que tengo te doy: en el nombre de Jesucristo de Nazaret, levántate y anda
.” Hechos 3:1-6. Noten que Pedro y Juan, a pesar de ser los apóstoles principales, no tenían ni un centavo en esta ocasión.
¿QUIÉNES ENTONCES APROVECHABAN (RECIBÍAN) ESTAS OFRENDAS?
En aquel tiempo el número de los creyentes iba aumentando, los de habla griega comenzaron a quejarse de los de habla hebrea, diciendo que las viudas griegas
no eran bien atendidas en la distribución diaria de ayuda
”. Hechos 6:1. Noten que había una distribución diaria para ayudar a las viudas.
PABLO Y LAS OFRENDAS.
Ahora vamos a examinar lo que enseñó el apóstol Pablo acerca del tema.
“Pero ahora voy a Jerusalén, a llevar socorro a aquellos hermanos. Porque los de Macedonia y Acaya decidieron voluntariamente hacer una colecta y mandársela
a los hermanos pobres de Jerusalén. Lo decidieron voluntariamente, e hicieron bien, porque así como los creyentes judíos han compartido sus bienes espirituales
con los no judíos, estos, a su vez, deben socorrer con sus bienes materiales a los creyentes judíos. Así que, cuando yo termine este asunto y les haya entregado la colecta, saldré para España, y de paso os visitaré
.” Romanos 15:25-18. Noten en el versículo 26 para quiénes era esta ofrenda: para los Hermanos Pobres. También vemos que era voluntaria. “En cuanto a la colecta para los del pueblo santo, hacedla según las instrucciones que di a las iglesias de la provincia de Galacia. Los domingos, cada uno de vosotros debe apartar algo, según lo que haya ganado, y debe guardarlo para que cuando yo vaya no tengan que hacerse colectas. Cuando llegue, daré cartas de recomendación a las personas que hayáis escogido, y las mandaré a Jerusalén para que lleven vuestra colecta.” I Corintios 16:1-3. Aunque muchos pastores utilizan este pasaje para justificar el pedir diezmos y ofrendas para sus propios fines económicos, noten en el versículo 1, que se trata de la misma ofrenda que Pablo menciona en Romanos 14, la cual era para los pobres en Jerusalén.
Más adelante en II Corintios Pablo habla más acerca de la misma ofrenda. “Ahora pues, dentro de vuestras posibilidades, terminad lo que habíais comenzado, y terminadlo con la misma disposición que mostrasteis al principio, cuando decidisteis hacerlo. Porque si de veras alguien quiere dar algo, Dios le aceptará la ofrenda que él haya hecho según sus posibilidades. Dios no pide lo que uno no tiene. No se trata de que por ayudar a los demás paséis vosotros necesidad. Se trata más bien de que haya igualdad. Ahora tenéis vosotros lo que a ellos les falta, y en otra ocasión tendrán ellos lo que os falte a vosotros, y de esta manera habrá igualdad. Además, las iglesias lo escogieron para que viajara con nosotros y ayudara en esta obra de caridad que estamos prestando para honrar al Señor y en prueba de nuestros deseos de ayudar.” II Corintios 8:11-15, 19
Vemos de nuevo que era una obra de amor.“Porque al llevar esta ayuda a los hermanos, no solamente les llevamos lo que les hace falta, sino que los movemos a dar muchas gracias a Dios.” II Corintios 9:12
¿Acaso estaba Pablo recogiendo algo para él mismo? Vemos que toda la exhortación que Pablo da en estos libros tiene que ver con esta obra de amor y no como los pastores corruptos de hoy en día lo malinterpretan para justificar sus propios intereses económicos y su avaricia.
Con todo, Pablo no recogió nada para él mismo. Si todavía queda duda acerca de esto veamos lo que él mismo dice acerca del asunto…”Ahora, hermanos, los encomiendo a Dios y al mensaje de su amor. Él tiene poder para hacerlos crecer espiritualmente y darles todo lo que ha prometido a su pueblo santo. No he querido para mí mismo ni el dinero ni la ropa de nadie; al contrario, bien saben ustedes que trabajé con mis propias manos para conseguir lo necesario para mí y para los que estaban conmigo. Siempre les he enseñado que así se debe trabajar y ayudar a los que están en necesidad, recordando aquellas palabras del Señor Jesús: ‘Hay más dicha en dar que en recibir.‘ “Hechos 20:33-35
¿Cuántos pastores hoy en día pueden decir como el Apóstol Pablo.. No he querido para mí mismo ni el dinero ni la ropa de nadie..? ¿Cuántos pastores hoy en día pueden decir como el Apóstol Pablo.. “Mi recompensa es la satisfacción de anunciar el evangelio sin cobrar nada; es decir, sin hacer valer mi derecho a vivir de mi trabajo en el anuncio del evangelio.” I Corintios 9:18?
Pablo mismo testificó aquí que él no cobró nada por anunciar el evangelio. ¡Qué contraste con lo que se escucha hoy día en los mensajes de los pastores
que predican para luego pedir una ofrenda! De estos pastores que toman las cosas de Dios como fuente de ganancia Pablo también habló…“…de hombres corruptos de entendimiento y privados de la verdad, que toman la piedad (nuestra fe) como fuente de ganancia. Apártate de los tales.” I Timoteo
6:5.
En resumen, los que quieren seguir a Cristo y el ejemplo de los apóstoles, si se encuentran en iglesias así que toman las cosas de Dios como fuente de Ganancia,
tienen que apartarse de ellos para estar dispuestos a dar mucho más que la décima parte a los que realmente necesitan. Así que les animo a buscar a los
líderes que en verdad están predicando el mensaje que Jesús y los Apóstoles predicaron acerca de ayudar a los necesitados. “Por lo cual, Salid de en medio de ellos y apartaos, dice el Señor, y no toquéis lo impuro; y yo os recibiré, y seré para vosotros por Padre, y vosotros me seréis hijos e hijas, dice el Señor todopoderoso.” II Corintios 6:17-18
Si Desea estudiar más acerca de cómo vivían los apóstoles y cómo apoyaban sus ministerios, aquí hay algunas citas para estudiar: I Corintios 12:16-17; II
Corintios 6:3-13; I Tesalonicenses 2:5-10; I Tesalonicenses4:10-12; II Tesalonicenses 3:6-12; Hechos 18:1-4.
El diezmo “era” de la ley (Mt.23:23). “Según la ley” (Heb.7:5).

sábado, 27 de septiembre de 2014

¿Redescubriendo el reino, como dice Myles Munroe?


Índice del Tema

“Porque hay aún muchos contumaces, habladores de vanidades y engañadores… a los cuales es preciso tapar la boca; que trastornan casas enteras, enseñando por ganancia deshonesta lo que no conviene” (Tito 1:  10, 11)

¿Redescubriendo el reino, como dice Myles Munroe?

Una de las grandes mentiras que se están esparciendo por parte de falsos maestros hoy en día, básicamente, consiste en decir que es ahora el momento en el cual los creyentes deberíamos estar reinando, conquistando y dominando en este mundo.
Myles Munroe le llama a esto vivir en el reino.
En términos teológicos, a esta herejía se le llama el “Reino Ahora”, y también “teología del dominio”, de ahí el término “dominionismo”.
Myles Munroe, muy conocido conferenciante motivador internacional, en su conferencia “Redescubriendo el reino”, hace poco impartida ante miles en la congregación de Guillermo Maldonado en Miami, estando él presente así como su esposa, estando allí también Cash Luna y su esposa y Ana Méndez y su esposo, así como otros renombrados presuntos ministros, expuso su falsa doctrina, la cual analizaremos en este estudio.
Es preciso tomarnos en serio este trabajo, ya que el grado de engaño está superando con creces cualquier consideración, y por tanto es menester atajarlo. Sirva esta refutación para ello.
(Pueden ver y escuchar enteramente esa conferencia en el link proporcionado al pie de este artículo. Todas las citas son de esa conferencia)
Comenzando, Myles Munroe en un tono poco menos que victimista, alude diciendo que este mensaje sobre el reino, él ya lo daba sin éxito en los setenta, viniendo a decir que era un incomprendido por parte de su audiencia cristiana, pero que en los ochenta y mayormente en los noventa se le empezó a hacer caso. Curiosamente coincide esto con el tiempo del auge de la apostasía que estamos viviendo, sobre todo a partir de este nuevo milenio.
Dice que los creyentes por siglos y siglos no han entendido lo que es el reino, y que ya es tiempo de “redescubrirlo”. Lamentablemente, ese “redescubrimiento” del reino que Munroe aporta, nada tiene que ver con el verdadero reino de Dios.

“Myles Monroe propone un reino que no es el Reino, pero que encaja muy bien con la ambición de los carnales”

“Myles Monroe propone un reino que no es el Reino, pero que encaja muy bien con la ambición de los carnales”

1. El reino vs el cristianismo, según Munroe

Sigue con su disertación haciendo una apología del reino (veremos que de su entendimiento personalista del mismo), en contra de lo que él llama religión, la cual pisotea sin misericordia, llegando a decir que el cristianismo es una religión más, y por tanto es insatisfactorio. El dice así:
“Esta es la razón por la cual la religión nunca va a satisfacer, incluido el cristianismo”
Acertadamente, dice que la religión básicamente es el esfuerzo del hombre para llegar a Dios, pero astutamente, en ese mismo contexto, incluye al cristianismo; de ahí que dice que el cristianismo es como cualquier otra creencia o religión.
Según Myles Munroe, el cristianismo no es lo que vino Jesús a enseñar, sino que él vino a enseñar acerca del reino. ¡Lo que obvia Munroe, es que el cristianismo enseña acerca del reino, aunque no como él lo hace!
Además se atreve a decir que los religiosos cristianos (*) se oponen tenazmente al mensaje del reino.
(*) Para Munroe, el cristianismo convencional o bíblico, es religiosidad, y sus proponentes son religiosos, comparándolos con los fariseos del tiempo de Jesús.

2. El mensaje de la Biblia, según Munroe

En cuanto a la Biblia, Myles enseña que el mensaje de la misma se reduce a tres cosas:
  1. 1. Un Rey.
  2. 2. Un reino.
  3. 3. Sus hijos, es decir, su familia real (los creyentes).
Dice que “la Biblia trata de un rey, y su negocio, el cual es regir o reinar, y todo trata de un negocio familiar… La Biblia trata de un reino colonizando la tierra”
Según Munroe, el mensaje de la Biblia se resume en ejercer dominio en esta tierra aquí y ahora, por parte de Dios, y por parte de los suyos. Eso es todo.
No enseña acerca del mensaje evangélico, cual es, el hombre pecó y se truncó la relación con su Creador, y que mediante Cristo y su sacrificio y resurrección, el hombre, creyendo, recibe la salvación y la vida eterna (Ef. 2: 8, 9).
La palabra pecado no aparece en los labios de ese falso maestro, ya que pecado tiene que ver con “religiosidad”, y esta es contraria al concepto triunfal de “reino”, según él.
El mensaje de ese hombre, aplaudido por Maldonado, Cash Luna, Ana Méndez, y muchos más es muy sencillo, así como carnal: dominio terrenal

“La Biblia es el libro de Jesús, y Jesús es el autor de nuestra salvación; salvación eterna, y esto nada tiene que ver con “dominio terrenal”

“La Biblia es el libro de Jesús, y Jesús es el autor de nuestra salvación; salvación eterna, y esto nada tiene que ver con “dominio terrenal”

3.El arrepentimiento, según  Munroe

Buscando el justificar su falta de espiritualidad, la cual llama religiosidad, Munroe nos habla del tema del arrepentimiento. En esta cuestión, por tanto, es tan sutil, como engañador. Enseña lo siguiente:
“La palabra arrepentimiento no significa caminar al frente en un culto religioso, traer a memoria tu pasado, llorar por ello, y sentirse mal… la palabra arrepentimiento significa cambio de forma de pensar, cambio de mentalidad. La palabra arrepentimiento significa cambiar la manera cómo has sido condicionado a pensar. La primera cosa que Jesús atacó en su ministerio fue tu mentalidad… tus conceptos e ideas y percepciones que están mal…”
Para Munroe (y todos sus correligionarios), pasar al frente confesando los pecados a Dios, sintiendo dolor por ellos, y apartándose de los mismos, no es arrepentimiento, sino simplemente un acto religioso; pero la palabra de Dios dice otra cosa:
“Porque la tristeza que es según Dios produce arrepentimiento para salvación…” (2 Corintios 7: 10)
Todo lo que este hombre entiende acerca de arrepentirse, es en cuanto a un cambio de forma de pensar, no un cambio del corazón (que es lo que la Biblia enseña).
Arrepentimiento para Myles Munroe es sólo pensar de manera diferente a como se solía pensar. Esto nada tiene que ver con valores morales, con cambio de conducta, con cambio del corazón, sino sólo con cambiar una mentalidad. No fue esa la enseñanza de Cristo.
Pero Munroe sabe por qué enseña de ese modo acerca del arrepentimiento, como un mero cambio de ideas. Para él la prioridad no es el cambio del corazón y el hacer la paz con Dios mediante Cristo, sino el creer que debe tomar las riendas de su propia vida y dominar todo lo que tenga a mano, ya que ese es su concepto del reino. Es un concepto absolutamente carnal.

“El arrepentimiento, en gr. metanoia, significa un cambio, no sólo de la mente natural, sino del corazón en la dirección de Dios por Su Espíritu"

“El arrepentimiento, en gr. metanoia, significa un cambio, no sólo de la mente natural, sino del corazón en la dirección de Dios por Su Espíritu. Otra cosa, no es arrepentimiento verdadero”

4. Juan y Jesús

Munroe apunta e incide hacia la cuestión de la mente y de la mentalidad como pretexto para enseñar su herejía. Dice lo siguiente, lo cual no es poco:
“Juan no predicó el bautismo, ese no fue su mensaje… Juan era el primo de Jesús, era seis meses mayor que él, y Jesús hizo de Juan su pastor, él se convirtió en un discípulo de Juan , se sometió a la filosofía de su maestro. Un discípulo se une a los pensamientos de su maestro.
En el tiempo de Jesús, había muchas escuelas donde enseñaban diferentes maestros, y esas escuelas se llamaban “escuelas del pensamiento”; así que Jesús hubiera podido ser parte de los fariseos, de los saduceos, los herodianos, los filósofos griegos, o los romanos, pero Jesús puso sus ojos sobre Juan, y le dijo, yo quiero tu filosofía, yo quiero tu enseñanza, yo creo en lo que tú piensas, ¿Cuál era su mensaje?, léelo:  Arrepentíos, porque el reino de los cielos está aquí (Mt. 3: 1) … Juan vino con un mensaje que no era religioso: arrepentíos porque el reino de los cielos ha regresado a la tierra, y Jesús dijo, ese es mi pensamiento, yo me voy a someter a eso, me voy a unir a ese maestro, esto es lo que yo creo, y se sometió a Juan y le dijo bautízame, hazme uno de tus discípulos, hazme un estudiante tuyo”. (énfasis nuestro)
La lectura de este pasaje es de por sí vomitiva. No obstante, pasemos a analizarla.
Munroe, a saber de dónde, hace de Jesús poco menos que un inepto, dubitativo acerca de a quién creer, hasta que se topa con su primo Juan que le ilumina.
Dice que al existir la costumbre en esa época de encontrar numerosas “escuelas de pensamiento”, Jesús decidió finalmente sujetarse a la “escuela de Juan”. Dice que Jesús, que era meses menor que Juan, hizo de Juan su pastor y maestro, convirtiéndose en su discípulo… ¿Dónde en la Biblia encontramos esto? ¿No es más bien lo contrario, cuando leemos de Juan diciendo que no era ni siquiera digno de desatarle el calzado al Señor? (Lc. 3: 16)
Pero todavía va más lejos, cuando asegura que Jesús se sometió a Juan, y por eso le pidió rogando que le bautizara, reconociendo que ese hombre enseñaba la verdad, y que él estaba por aquel entonces buscándola (¿?). De ese modo, él (Jesús) predicó lo mismo que Juan.
¡Qué terrible blasfemia! La Palabra que dice de Juan que es el más pequeño en los cielos (Mt. 11: 11), resulta que debe mentir, ya que Munroe dice que Juan es superior a Jesús.  Munroe, no sólo dice cosas que no vienen en la Biblia, sino que dice cosas que la contradicen, haciéndola mentirosa.
Jesús no le dijo a Juan que le bautizara como señal de estar bajo él, ni siquiera bajo su enseñanza, sino para darnos ejemplo:
“Pero Jesús le respondió: Deja ahora, porque así conviene que cumplamos toda justicia. Entonces le dejó”(Mt. 3: 15)
Véase que una vez fue bautizado, se apartó de él.
Nada que ver con lo que enseña Munroe.
Como Myles Munroe, muchos otros sin escrúpulos hacen que la Biblia diga lo que ellos quieren que diga, con el fin de apoyar sus necedades y blasfemias. ¿Será que Dios no va a juzgar esto?
Ahora bien, según enseña Munroe, fijémonos en el mensaje de Juan, que luego, según este falso maestro, copió Jesús:
“En aquellos días vino Juan el Bautista predicando en el desierto de Judea, y diciendo: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado” (Mateo 3: 1, 2)
Myles Munroe dice que ese era un  mensaje no religioso, que quería decir lo siguiente: Cambia tu manera de pensar. Ya no pienses en negativo sino en positivo. No eres un perdedor, sino un ganador, un campeón, un conquistador. Piensa y cree que eres un rey, y por tanto tienes dominio. Ejerce tu dominio hasta donde de lugar en esta tierra. El reino está en tus manos.
No es más que el mensaje típico de la Nueva Era.
¿Tiene esto que ver con el mensaje de Cristo de llevar la cruz todos los días, de perder la vida para hallarla, de morir a uno mismo para que Cristo viva? (Gl. 2: 20)
Nada que ver con contrición o dolor por el pecado cometido (concepto absolutamente ausente de su predicación); nada que ver con buscar el hacer la voluntad de Dios, nada que ver con buscar el agradar a Dios. ¡Nada que ver con el Evangelio!
Para este hombre y todos los que están con él, el tener la mentalidad del reino significa: autosuficiencia, y tener control y dominio sobre todo. Es el mismo mensaje de Satanás cuando dijo a Eva: Seréis como Dios” (Gn. 3: 5)
En este sentido, Munroe cada vez fue más lejos en su disertación. Leyendo Lucas 4: 43, exclamó:
“Jesús sólo tenía una buena noticia: el reino…Jesús no vio el Calvario, la Cruz, como su prioridad; el dijo yo vine con el propósito de devolver al hombre el reino de los cielos. Estas son las buenas nuevas, usted puede recuperar el reino otra vez(énfasis nuestro)
Claramente y sin ambages, Munroe dice lo que dice: la cruz no es lo más importante, sino el reino “recuperado”. Pero sin la cruz, no hay nada, sólo el infierno.
Ese “reino” constituiría el dominio del hombre sobre la tierra, es decir, el hacer cada uno su propia voluntad en esta vida. Esto último es claramente así, porque el mismo Munroe cree que el nacer de nuevo no es importante. Por tanto, una persona que no ha nacido de nuevo y “cree” en el reino, lo que hará será, no la voluntad de Dios, sino la suya propia.

“Myles Monroe enseñó en la iglesia de Guillermo Maldonado, ante él y complacido”

“Myles Monroe enseñó en la iglesia de Guillermo Maldonado, ante él y complacido”

5. Myles Munroe quita toda la importancia a nacer de nuevo

Según Munroe, el reino del que Juan el Bautista primero, y luego Jesús enseñaron, es lo que todos los hombres, solamente por creerlo en su mente, tienen el derecho de recibir, no importando el nacer de nuevo, o no. ¡Sí, sí, han leído bien!...
En el minuto 51 de su conferencia, osadamente, Myles Munroe dijo exactamente lo siguiente ante los miles reunidos allí, y por el beneplácito de los Maldonado y comparsas:
“Jesús nunca predicó acerca de nacer de nuevo, él sólo mencionó acerca de nacer de nuevo una vez, y nunca lo predicó a la multitud, porque ese no fue su mensaje. Sólo mencionó el nacer de nuevo a un hombre viejo, a un solo hombre a las dos de la mañana, porque nacer de nuevo no era el evangelio, esas no son las buenas nuevas. Jesús nunca predicó fe, nunca predicó liberación”(énfasis nuestro)
Mi pregunta es, ¿Por qué estos – como Myles Munroe - que obviamente no son cristianos, les predican a miles de presuntos cristianos con el beneplácito de pastores que se supone son cristianos? Y voy más allá, por otro lado, ¿Cómo es que ministros que tienen una sana doctrina, no hacen nada para taparles la boca a esos farsantes del evangelio? (Ti. 1: 11) ¿Cobardía quizás?
Es realmente triste ver al pastor de esa iglesia, Maldonado, y a sus correligionarios aplaudir a ese hombre, el cual tuvo todo el tiempo de parte de Maldonado para seguir en el púlpito con sus aberraciones. Así es que él estaba de acuerdo con este mensaje.
Si el nacer de nuevo no es importante, entonces Jesús fue a la cruz de balde, ya que según este nefando hombre de púlpito, esa no era ninguna prioridad para Jesús. De ese modo, quizás Jesús hubiera podido ahorrarse ese sufrimiento; ¿Quizás no escuchó bien al Padre cuando le instaba a dar su vida por todos; quizás y después de todo Pedro le decía bien en cuanto a no ir a la cruz…?
Este, ni siquiera es “otro evangelio”. Esto es una blasfemia sin límites.

“Myles Munroe, posando”

“Myles Munroe, posando”

6. El problema es el de ser pobres de espíritu, según Munroe

Según Myles Munroe, el problema de la humanidad no es el pecado, sino el ser pobre de espíritu, a lo cual llama tener un vacío espiritual. El dijo así:
“Jesús ve a todos los habitantes de la tierra y analizándolo todo llega a una conclusión: todos sufren pobreza espiritual; vacío espiritual. ¿La solución? El reino de los cielos. Esta es la razón por la cual la religión nunca va a satisfacer, incluido el cristianismo
Ese “vacío espiritual” para Munroe, no sería el causado por el pecado y la consecuente separación de Dios, sino por el no conocer la posibilidad de ejercer dominio en este mundo; lo que él llama el reino. De ahí que él mismo asegura que la fe cristiana no puede satisfacer a nadie.
Leyendo Mateo 5: 3, donde dice “Bienaventurados los pobres en espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos”,Munroe asegura que el reino es para todos los hombres sin excepción, ya que todos son pobres en espíritu, y eso sólo por cambiar de mente (el arrepentimiento según él), para así recibirlo.
Para Myles Munroe, fallando absolutamente en su exegética, los hombres todos son pobres en espíritu. Eso no es cierto. Su concepto es que “pobre en espíritu” significa necesitado de entender que tiene el dominio de parte de Dios para ejecutarlo en esta tierra. No obstante,  Jesús quiso decir algo muy diferente a lo que dice Munroe que dijo.
Cuando el Señor hablaba de ser “pobre en espíritu”, estaba hablando de todos aquellos que se ven necesitados de Dios, que temen a Dios, que reconocen la necesidad del ministerio de Jesús (la cruz y su resurrección), ya que de los salvos, y por tanto hijos, es el reino. Es el reino ahora en nuestras vidas, y será el reino visible cuando Él regrese, y se manifieste lo que hemos de ser (1 Jn. 3: 2).
Para Munroe, Jesús, así como Juan, fueron simples predicadores y expositores del reino, poco más. El mérito sería el del creyente, que al cambiar su manera de pensar (arrepentimiento, según él), ahora cree que va a ser un campeón, ya que tiene de parte de Dios el llamamiento de serlo, dominando este mundo.
En ese sentido asegura que todos los hombres buscan el reino. A tenor de Mt. 24: 14, dice así:
“Cuando el evangelio del reino sea predicado a todo el mundo, ¿cuál evangelio?, pero ¿qué hemos predicado? ¿el de nacer de nuevo?, por eso los musulmanes no buscan a Dios, porque no buscan el nacer de nuevo sino que buscan el reino, por eso los budistas no vienen al cristianismo, porque el cristianismo es una religión, no es el reino. Por eso lo hindús no vienen. Lo que buscan todos es el reino”
¡Barbaridad sobre barbaridad! Menospreciando la necesidad de nacer de nuevo (Jn. 3: 3), y por tanto la salvación propiamente dicha, Myles Munroe asegura que ningún hombre está interesado en nacer de nuevo, sino en el reino, es decir, en el dominar en este mundo. En esto tiene razón, los hombres no buscan a Dios por sí mismos, pero esto no es lo que ha querido decir. Lo que ha querido decir, es lo que ha dicho: que hay que predicarles a los hombres según sus deseos carnales: dominio, conquista, poder, gobierno, riquezas, prosperidad, etc. todo lo que cualquier pagano, idólatra e impío desea en esta vida, porque la salvación (el nacer de nuevo), no es la cuestión… por lo tanto, según Munroe – y que ya lo dijo - la cruz no es la cuestión.
Y yo me pregunto, ¿por qué gente como él y muchos más se presentan ante todos como predicadores evangélicos? La respuesta es simple; les interesa el favor de las masas crédulas, de dónde sacan sus muchos emolumentos, con el consentimiento de pastores tibios o torcidos.

“El llamado “Reino Ahora” no es más que el adelanto o preparación de lo que será el reino de la Bestia Anticristo, ¡piénsenlo!”

“El llamado “Reino Ahora” no es más que el adelanto o preparación de lo que será el reino de la Bestia Anticristo, ¡piénsenlo!”

7. Según Munroe Jesús no puede volver todavía

“Y el Espíritu y la Esposa dicen: Ven. Y el que oye, diga: Ven…El que da testimonio de estas cosas dice: Ciertamente vengo en breve. Amén; sí, ven, Señor Jesús”(Apocalipsis 22: 17, 20
El mensaje bíblico por excelencia después de la salvación y de la consiguiente resurrección o transformación (1 Ts. 4: 17), es sin duda la venida del Señor, como hemos leído. Esta es la doctrina evangélica.
Jesús dice: “Ciertamente vengo en breve”
Ahora bien, Munroe dijo en esta su conferencia, aplaudiéndole y vitoreándole todos los que allí estaban según se puede ver con claridad en la grabación, incluidos los tres “espadas”, a saber, el anfitrión, Guillermo Maldonado, Cash Luna y Ana Méndez, que, de ninguna manera el Señor va a volver todavía. Para eso, y como ya es costumbre, enarboló el manido versículo 14, de Mt. 24.
Dijo así, burlándose de los predicadores como nosotros:
“Dicen: ¡Estén preparados, Jesús viene pronto!... ¡Cállense! Que el Señor viene pronto, no es el mensaje, no es el evangelio, dejen de enseñarlo, dejen de mentir al pueblo…”
Burlándose de los que creemos la verdad revelada, reiteradamente se burlaba también de la pronta venida del Señor, diciendo que eso nada tiene que ver con el Evangelio, y que los predicadores debemos dejar de enseñarlo.
¡Qué terrible osadía la de ese hombre!
Según él, la razón por la que Jesús no viene, es porque no se está predicando el evangelio del reino, es decir, su perverso y pervertido concepto del evangelio del reino.
Dice así a colación de esto:
“No hay otro mensaje. Mi corazón se rompe, porque vuestra religión no está funcionando. Un reino es un gobierno. No es una religión, es un gobierno. La Biblia dice que nosotros somos gobernadores”
Según él, el Señor no puede regresar porque los creyentes somos religiosos, vacíos espirituales, y no estamos reinando de hecho en esta tierra, subyugando todos los poderes habidos y por haber. Así pues, el retorno del Señor depende de nosotros… ¡Crasa herejía!
¿Nos ha llamado el Señor a gobernar este mundo? ¡No! El Señor nos dijo: Id y predicad el evangelio a todas las naciones, y hacer discípulos, bautizándolos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Jamás la iglesia ha recibido la encomienda de gobernar, reinar, dominar, sino de andar como Él anduvo (1 Jn. 2: 6); y sabemos como Él anduvo, ¿no es cierto?

“Decir que Cristo no puede volver aún, es como decir: “Señor, todavía no puedes volver, todavía hemos de reinar nosotros por un buen tiempo, ¡Absurdo!”

“Decir que Cristo no puede volver aún, es como decir: “Señor, todavía no puedes volver, todavía hemos de reinar nosotros por un buen tiempo, ¡Absurdo!”
Halagos y lisonjas y más mentiras
Lisonjeramente, dirigiéndose a Guillermo Maldonado y a su esposa, Myles Munroe les dice lo siguiente refiriéndose a su iglesia:
“Esta iglesia es la mayor manifestación en esta ciudad del reino de una iglesia del reino, la cual está dominando sobre todo el área, y apenas comienza”. 
Los aplausos de Maldonado y su mujer no se dejan esperar, así como los vítores de la audiencia. Seguidamente anima a sus oyentes a poner en práctica el concepto del reino que según él, Dios les ha dado, y dice:
“Abra su propio banco, abra su propia compañía de seguros, abra su propia estación de radio y de TV, abra su propio negocio, domine toda la ciudad; esta es la vida del reino. Esto no es acerca de religión, es acerca del regreso de una cultura, la cultura del reino; Gracias que el reino ha llegado a Florida, en Colombia, Paraguay, etc. etc.”
¿Era este el concepto del reino que Jesús predicó, un reino en este mundo, hacia este mundo condenado? Obviamente, no.
No es más que la carnalidad puesta en acción. No es otra cosa sino la manifestación visible de las palabras inspiradas de Pablo:
“Porque los que son de la carne piensan en las cosas de la carne”(Romanos 8: 5)

Concluyendo

Myles Munroe se equivoca en su entendimiento del reino. Jesús anunció que el reino se había acercado, porque Él es el Rey, y vino a los suyos, a las ovejas perdidas de Israel  de parte del Padre, para decirles que si le aceptaban como su Mesías – que lo es – el reino prometido a Israel vendría para quedarse.
El reino se volvió al cielo, con el Rey (no hay reino sin rey) porque Israel rechazó a Jesús, y será así hasta que digan bendito el que viene en el nombre del Señor. Eso será en su segunda venida.
El reino sobre la tierra, mayormente tiene que ver con Israel, el cual todavía ha de ser salvo (Ro. 11: 25, 26), el cual será el reino del Milenio o milenial.
Evidentemente, junto con todos los de su cohorte, Munroe es absolutamente reemplacista.
El reino visible en este mundo no existe, sólo en la mente febril de Munroe y de miles más que no entienden o no quieren entender lo que la Biblia enseña.
El reino para Myles Munroe y cientos más, si no miles, es en cuanto a lo visible, tangible, aquí y ahora, y desde una perspectiva absolutamente carnal, todo lo cual anhela cualquier impío; pero ese no es el reino de Dios el cual él dice predicar. Enseñó un verdadero siervo de Dios, el apóstol Pablo:
“porque el reino de Dios no es comida ni bebida, sino justicia, paz y gozo en el Espíritu Santo”(Romanos 14: 17)
Ese Reino es el que está dentro de cada verdadero creyente, por tanto, nacido de nuevo.
El reino de Dios está en cada creyente en el momento en el que nace de nuevo por el Espíritu, y consecuentemente es salvo (Ef. 2: 8). El reino de Dios aquí y ahora está en el verdadero creyente, y nada tiene que ver con este mundo:
“Sabemos que somos de Dios, y el mundo entero está bajo el maligno” (1 Juan 5: 19)
El reino de Dios nada tiene que ver con este mundo; mundo que está a la espera de recibir la ejecución de su sentencia de parte de Dios (1 Ts. 1: 10)
El reino de los cielos, nada tiene que ver con las cosas que hay en este mundo, ni con el amor al mismo, sino todo lo contrario:
“No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él. Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo. Y el mundo pasa, y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre” (1 Juan 2: 15-17)
Myles Munroe predica acerca de las excelencias de este mundo, las cuales todos los cristianos deberíamos buscar, poseer y dominar; no obstante, la Biblia, la cual él minimiza, dice otra cosa:
“Si, pues, habéis resucitado con Cristo, buscad las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios. Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra. Porque habéis muerto, y vuestra vida está escondida con Cristo en Dios.  Cuando Cristo, vuestra vida, se manifieste, entonces vosotros también seréis manifestados con él en gloria” (Colosenses 3: 1-3)
Hay mucho más que dijo este hombre, pero baste con esto de momento.
Dios les bendiga.
© Miguel Rosell Carrillo, pastor de Centro Rey, Madrid, España.
www.centrorey.org
Enero 2011
Cita:
“Redescubriendo el reino” Myles Munroe  http://vimeo.com/10673292

FIN