No
podremos hablar de Jesucristo, sin usar la doctrina bíblica de por
medio, de no hacerlo me temo que incurriremos en la predicación no del
Jesucristo de la Biblia, si no en la predicación de un "Jesucristo"
hecho a la medida de los intereses del hombre. ¡A gusto del Cliente!
Como dirían muchos negociantes.
Esos
falsos "Jesucristos" son seguidos por miles, quienes aprendieron de un
falso predicador que la doctrina bíblica es sinónimo de religiosidad y
el defenderla es farisaísmo y legalismo. Aprendieron todo este veneno
espiritual, bajo la bandera de un falso amor putrefacto en permisividad y
relativismo. Que dice que se puede vivir en unidad, sacrificando y
omitiendo la doctrina de Dios. Pero no se equivoque ellos no hablan de
aquella unidad divina que trae el Espíritu Santo al actuar en medio de
su pueblo: los redimidos. ¡No! Ellos hablan de la unidad concebida en
la mente destructora de Satanás, es aquella “unidad” de pensamiento y
creencias, en base al error y un grupo de falaces argumentos como estos:
¡AMÉMONOS NO IMPORTANDO LO QUE CREAMOS CADA UNO DE NOSOTROS!
¡DEJEMOS
A UN LADO LA RELIGIOSIDAD (DOCTRINA BÍBLICA) QUE DIVIDE PARA FUNDIRNOS
EN UN SOLO PENSAMIENTO DE “UNIDAD”; UNÁMONOS EN “AMOR”!
-Que
vil y repugnante es esto, mi estimado lector. Dejar aun lado lo central
del mensaje de Dios, para pretender una supuesta “unidad” guiada mas
por emociones y razonamientos de hombres cuya característica principal
es que están de espaldas a Dios y a su palabra: la Biblia.
Esta
es la razón de porque hoy tenemos tal crisis en la cristiandad
contemporánea, como nunca antes se ha visto en la historia humana. Esta
es la fuente del error, la que alumbra, tanta herejía y atrocidad
doctrinal que hoy en día tiene a millones de almas inmersos en el engaño
de que son salvos del infierno e hijos de Dios. Cuando la triste
realidad es que todavía van por el sendero cuyo destino final sigue
siendo la condenación eterna y no el paraíso lleno de frivolidades como
les han prometido, aquellos ministros del error.
2Co 11:14 Y no es maravilla, porque el mismo Satanás se disfraza como ángel de luz.
2Co
11:15 Así que, no es extraño si también sus ministros se disfrazan
como ministros de justicia; cuyo fin será conforme a sus obras.
Como creyentes y salvos por la sola fe en Jesucristo, debemos tener muy en cuenta la palabra de Dios, que al respecto dice:
2Jn
1:9 Cualquiera que se extravía, y no persevera en la doctrina de
Cristo, no tiene a Dios; el que persevera en la doctrina de Cristo, ése
síe tiene al Padre y al Hijo.
2Jn 1:10 Si alguno viene a vosotros, y no trae esta doctrina, no lo recibáis en casa, ni le digáis: ¡Bienvenido!
2Jn 1:11 Porque el que le dice: ¡Bienvenido! participa en sus malas obras.
-Si alguien no sigue la doctrina de cristo, y persiste en enseñar el error es clara señal, de que nunca fue salvo.
-Si
alguno nos pretende enseñar otra doctrina, no lo piense dos veces y
confróntelo y amonéstelo a dejar el error, de no hacerlo aléjese, no le
digas: ¡Bienvenido! ¡Somos “hermanos”, solo miremos el amor y dejemos la
doctrina que nos divide! No haga ello, porque si no terminara siendo
participe de sus malas obras.
DE MANERA QUE LA DOCTRINA BIBLICA ES IMPORTANTE.
Estamos llamados a levantarla en el alto y mantenerla como estandarte de nuestra fe.
Con justa razón Judas(no el Iscariote) dice:
Jud
1:3 Amados, por la gran solicitud que tenía de escribiros acerca de
nuestra común salvación, me ha sido necesario escribiros exhortándoos
que contendáis ardientemente por la fe que ha sido una vez dada a los
santos.
Jud
1:4 Porque algunos hombres han entrado encubiertamente, los que desde
antes habían sido destinados para esta condenación, hombres impíos,
que convierten en libertinaje la gracia de nuestro Dios, y niegan a
Dios el único soberano, y a nuestro Señor Jesucristo.
FINALMENTE:
SI
VAMOS A PREDICAR AL JESUCRISTO DE LA BIBLIA, SIN DUDA TENDREMOS QUE
HABLAR TAMBIÉN DE LA DOCTRINA BÍBLICA, AQUELLA QUE HABLA DE:
SU OBRA PERFECTA A FAVOR DE LOS REDIMIDOS EN LA CRUZ DEL CALVARIO;
SU GRACIA, SOBERANÍA Y AMOR ETERNAL.
Es
mejor estar divididos por la doctrina Bíblica a unidos en un falso
"amor" letal y ponzoñoso, donde se permite cualquier inimaginable
disparate doctrinal. Disparates que hoy encaminan a millones al averno y
que sin lugar a dudas abundan en el error.
En Jesucristo.
Hno. Rafael Salinas V.
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